Leer Previamente Esto...
[00]Prologo-...
[01]Del como tuve que partir-...

Después de haber sido dejado de lado como algún perro misero, y con la excusa de que no encajas aquí, no me quedo de otra nada mas que irme a vivir con unos parientes, mientras veía que iba a ser de mi vida, pero si me preguntan yo a esa familia nunca les vi el parecido a mi.

Yo soy un poco de tipo ascendencia europea, con una mezcla bien de rasgos étnicos y cierta negrura, soy de tez clara, pero con pelos de zambo [ondulado] y lampiño hasta los pies, y con una sombra de bigote.
A diferencia de ellos que eran blancos, al menos Camila era la típica gringita, con ese pelo ondulante y unos destellantes ojos verdes, y una figura de niña mujer que volvería loco a cualquiera, su padre era alto mas que mi profesor negro que se "tiraba" a mi mama, y le hizo un hijo para después botarme, desterrandome del lugar donde era feliz.

Y su madre que era de una contextura mediana, ni tan gorda ni tan flaca, pero con unas tetas enormes [o al menos en este tiempo me parecían] y un culo que asomaba, no era espectacular pero no era como también para dejar "que pase frío".
Era una señora muy amable por decirlo menos, siempre me narraba historias de mi padre, que me sonaban a mentiras, o a que ella se había equivocado de persona, aunque opte por el silencio, no tengo planeado arriesgarme a sacarla de su error.

Me toco vivir al final del pasadizo, muy cerca a los baños y duchas comunes, donde en alguna fiesta de ellos un borracho habia hecho un agujero, y esa era la razon por que el armario gigante estaba en mi cuarto.

Yo pase los dias tratando de ser amable y no causar molestias para que no me vayan a correr de ahi, nunca me senti seguro hasta que descubri las manias de Antonio [el padre de Camila] una vez que yo supuestamente me iba acompañar a Fernanda [la madre de Camila] a hacer unas compras pero al final se cruzo con unas amigas y me vio con una carita de aburrido y me envio de regreso a la casa, y yo obedeci sin chistar, vi a Camila dirigiendose a los baños comunes, con una toalla cubriendole toda su desnudez, pasando por el cuarto de sus padres y diciendole:

Ya me voy a bañar papi...

Y se fue al baño comun, y muy seguido y con una prisa Antonio se dirigio a mi cuarto, yo lo segui me preocupe que estuviera revisando mis cosas, pero tampoco podia inquirir hacia el de esa manera, despues de todo el me estaba dando alojamiento y tal vez buscaba algo para que yo no hiciera daños a su familia. Al fin y al cabo yo era un desconocido para ellos.

Le segui y me fui a mi cuarto, para decirle que no iba hacer nada malo contra su familia y aclararle alguna duda que el pudiera tener sobre mi, mas grande fue mi sorpresa cuando al abrir la puerta y no verlo, pense que raro habra sido mi imaginacion, debe ser el frio y fui a coger una chaqueta de las que tenia guardadas en el armario gigante, y me di cuenta de quien estaba ahi, era Antonio con el pantalon por las rodillas y observando como loco a travez de un pequeño agujero cubierto por un cartón, se estaba masturbando viendo a su hija que desastre.

Aunque en mi interior no lo culpo, era una chica muy sensual, y extremadamente bonita aunque con sus manias, y hasta cierto punto era mejor así, en vez de aprovecharse de ella, era un mero vouyerista inofensivo, un pervertido en medias tintas.
El no se percato mucho de mi presencia, yo tampoco queria hacer ruido por que no vaya ser que escuche Camila lo que estemos hablando y se preocupe y se de cuenta que su padre es un pervertido, seria un shock muy grande para ella, y por ahora no queria lastimarla.

Cogí la chaqueta cerré la puerta del armario, y procedí a tocar otra vez la puerta y Antonio me contesto:

-¿que haces aquí? Espera un momento...


Yo debería de preguntar eso no crees-respondí

Apresurado salio y me dijo que este seria nuestro pequeño secreto, desde ese momento ya me sentí mas cómodo en la casa, ya no me daba tanto miedo rondar por ahí.

Al día siguiente, en la gran casa, había una piscina que nunca me habia atrevido usar y que ahora sintiéndome mas seguro lo haría, fui cogí mi mejor short y me dirigi una toalla, estaba ligeramente desierta la casa y eso me daba cierta comodidad y entonces desde el trampolín me zambullí, el agua estaba deliciosa y decidí volver a zambullirme salí de la piscina y el short no estaba bien sujeto y por la fuerza de arrastre del agua se me bajo el short no me preocupe mucho y sali y fuera del agua me acomode, grande fue mi sorpresa cuando alguien dijo

tienes un bonito trasero y se empezó a reír...

Era Camila, en un traje rojo de dos piezas que le sentaba perfectamente.

Me dijo ahora estamos iguales, y yo sorprendido le dije si yo no te he visto el trasero,

Jaja como que no y ayer? O no te gusto lo que viste?

No podía dejar que ella supiera que era su padre el que la estaba viendo. Me quede en silencio mucho rato

No te preocupes, no me importa el que tu me hayas visto, por eso hice ese baile [me intriga que baile habra hecho] pero dime una cosa te gusto lo que viste?

Yo no podia responder eso, no había visto nada y solo logre balbucear un... No!

Ella bajo la cabeza y con una mirada viendo al agua me dijo, ven acercate no seas timido, y yo me acerque a ella, dame tus manos y dejo guiar mis manos a travez de su cuerpo, preguntando siempre te gusto?

Podría yo intentar decir no? pero todo al final seria en vano mi cara denotaba un gusto increíble, las sensaciones que me producían me hacían recordar mucho la otra vez que una chica me dejo tocar sus senos, producía sensaciones que me dan mucho placer, me soltó las manos, y yo empece a bajarlas, ella se acercaba mas a mi, ella debe haber sentido mi erección, se estaba desabrochando la parte de su bikini, dije detente...

No importa, no hay nadie en la casa a esta hora-replico ella

Quería verlas, me moría por ver sus tetas, pero a pesar de que podia dominar a su padre no sabría como reaccionaria su mama, así que le dije que no en otro momento...

Me hundí, me quede buen rato sumergido en el agua y ella me siguió me tomo la cara y me imprimió un beso...

Salí del agua con ella, lo dejamos para otro momento, su padre gritaba su nombre y le decían que habían llegado...

Pasaron los días, no volvimos hablar de esto hasta el día que jugamos a las escondidas en la casa, habían venido de visita familia de ella y sobrinos , sobrinas, Fernada y Giordana, nos escondimos en el armario...mientras en la casa la gente disfrutaba el día mas caluroso en mucho tiempo...